Colombia no puede perpetuar sus víctimas” señaló Personero de Cali en el acto simbólico en honor a los Diputados del Valle

Hoy se conmemoran 23 años del secuestro de los diputados del Valle del Cauca, un hecho violento que marcó profundamente la historia del departamento y del país. El 11 de abril de 2002, las FARC irrumpió en la Asamblea Departamental, comprometiendo la vida de los diputados y afectando también a Walter López y Héctor Sandoval, integrantes de RCN y al subintendente de la Policía Nacional, Carlos Alberto Cendales.

El Personero de Santiago de Cali, Gerardo Mendoza Castrillón, se pronunció sobre esta fecha que invita a la reflexión y a la acción colectiva:

“Hoy es una fecha muy importante que nos convoca, conmemorando 23 años del secuestro de los diputados y de las demás víctimas que dejó ese acto cruel. Todo ello nos lleva a recordar a quienes sufrieron directamente las consecuencias de este episodio, porque Colombia no puede seguir viviendo en medio de un derramamiento de sangre. Han sido 60 años de guerra que, si bien han permitido avanzar en la reivindicación de algunos derechos, también han traído consigo un escalonamiento del conflicto que sólo ha dejado muerte y víctimas. Las víctimas no pueden ser perpetuas en un territorio que clama justicia, verdad y paz”.

El Personero también hizo un llamado enfático a las instituciones del Estado para fortalecer redoblar esfuerzos en la protección de la vida y la garantía de los derechos humanos:

“Debemos sumar nuestros esfuerzos como instituciones para combatir cualquier acto criminal que atente contra la población civil. Las reglas del Derecho Internacional Humanitario tienen que respetarse en Colombia. Es urgente desescalar el conflicto y construir caminos de esperanza para vivir en paz, preservando la vida como el derecho más fundamental. Sólo con unidad institucional podremos avanzar hacia esa paz total que todos anhelamos en un país que repito, exige justicia”.

Desde la Personería Distrital de Cali, se reafirma el compromiso indeclinable con la memoria de las víctimas, la defensa de los derechos humanos y la construcción de una sociedad justa, solidaria y en paz.